Virus del papiloma humano
El virus del papiloma humano (VPH) integra un grupo de más de 100 tipos de virus que mayoritariamente se manifiestan con verrugas en las manos y los pies. Sin embargo, hay algunos con una especial capacidad para infectar el área genital y se transmiten por contacto sexual. La mayoría de hombres y mujeres activos sexualmente lo tienen o lo han tenido en algún momento de su vida y la mayoría no lo saben ni lo han sabido.
Lo podemos clasificar según su virulencia:
- Ningún riesgo: no tienen efectos perjudiciales en absoluto
- Bajo riesgo: pueden provocar verrugas genitales
- Alto riesgo: pueden provocar cambios celulares que pueden inducir un cáncer del cuello uterino, vulva, vagina y ano. En los hombres, pueden provocar cáncer de ano y del pene.
La mayoría de infecciones por el virus del papiloma humano desaparecen por sí solas entre el 8- 13 mes de la infestación. Sin embargo, hay ciertas infecciones que no desaparecen y se quedan en estado latente en el cuerpo durante años sin ser detectadas. Es por este motivo que muchas veces es muy difícil determinar el foco de infección.
Como que la mayoría de las infecciones por VPH no provocan sintomatología, se recomienda realizar frotis de raspado cervical (Papanicolau), así como los tests específicos de forma rutinaria como prevención y como detección precoz de un posible cáncer de cérvix. Sobre todo en las personas consideradas de alto riesgo:
- Conducta sexual de alto riesgo – sin prevención
- Fumadores
- Mujeres con un alto número de embarazos
- Malnutrición
- Sistema inmunológico deprimido
Aunque en la actualidad, no existe un tratamiento médico específico antivírico, las verrugas genitales se suelen tratar con aplicaciones tópicas, crioterapia o bien con tratamiento láser.